Las Islas Vírgenes Británicas son una de las joyas ocultas del Mar Caribe y un fantástico paraíso para cualquier inversor.

Cuando se piensa en paraísos fiscales en el Caribe, lo primero que viene a la mente son las Islas Caimán. Pero un paraíso para el inversor más discreto e igualmente especial son las Islas Vírgenes Británicas. 

Esta joya caribeña se ha forjado su fama de ser una tierra ideal para cientos de miles de inversores que, además de generar grandes ingresos, suelen disfrutar de algunas de las mejores playas del planeta.

Situado justo al este de Puerto Rico, este territorio perteneciente al Reino Unido comprende 50 islas, cayos y formaciones volcánicas en un área que alcanza las 59 millas cuadradas, cada una de ellas imprimiendo una belleza caribeña sin igual. 

Sede de festivales de vela de fama mundial, este maravilloso archipiélago de islotes vírgenes es impresionante.

Dentro de tanta belleza caribeña, las Islas Vírgenes Británicas son el paraíso de las inversiones. Si se pregunta a un experto financiero sobre el lugar ideal para crear una empresa, la respuesta probablemente será estas islas. Ofrecen una legislación fiscal amigable, leyes de confidencialidad que protegen las operaciones y procesos burocráticos poco o nada lentos. 

Conociendo el funcionamiento de las Islas Vírgenes Británicas, es prácticamente imposible encontrar un entorno mejor para hacer negocios.

-Hogar de las sociedades offshore: Es posible que sepa que a las sociedades offshore se les llama a veces "BVI". No es de extrañar que el término provenga de estas islas y de su capacidad para atraer inversiones extranjeras. Las IVB han establecido una legislación que se adapta a la condición necesaria de las empresas para invertir y generar riqueza.

-Exenciones fiscales: Una cualidad única de las Islas Vírgenes Británicas es su increíble sistema impositivo que permite a las empresas conservar la mayor parte, si no la totalidad, de sus ganancias. El paraíso para los inversores y los entusiastas de las finanzas.

-Política de confidencialidad: No hay lugar donde las empresas sean tratadas con mayor discreción que en las Islas Vírgenes Británicas. Todas las empresas legales pueden tener la confianza en que su información sobre operaciones estará más segura allí que en cualquier otra parte del mundo.

-Políticamente estable: Al ser una democracia parlamentaria, las Islas Vírgenes Británicas cuentan con un notable equilibrio institucional que otorga a todos los ciudadanos e inversores un velo de confianza y estabilidad.

-Servicios públicos sin fallos: Las condiciones de vida de las IVB son comparables a las de los países desarrollados de Europa Occidental. La escasa o nula mortalidad, las grandes infraestructuras y el funcionamiento permanente de los servicios públicos básicos aseguran el bienestar de la mayoría de sus habitantes.

-Sólida reputación bancaria: Las Islas Vírgenes Británicas están consideradas como un modelo en materia bancaria y con mucha razón. Todos sus bancos locales tienen una gran reputación internacional por ser las opciones más fiables de la región y del mundo.

-Paraíso caribeño: Con algunas de las costas más atractivas de todo el Mar Caribe, las Islas Vírgenes Británicas no son sólo el sueño de los inversores, sino de miles de veraneantes de todo el mundo.


Conozcamos más sobre las Islas Vírgenes Británicas

Descubiertas inicialmente por una de las expediciones de Colón, estas islas no fueron debidamente colonizadas hasta 1648 por los holandeses, lo que explica la "virginidad" del archipiélago. Un par de décadas más tarde, los británicos lucharon contra los holandeses para hacerse con el control de Tórtola, Anegada y Virgen Gorda, actualmente las tres islas más importantes. 

Desde entonces, el Reino Unido tiene el control de la zona y la ha convertido en una de las mayores economías del Caribe. El objetivo era convertirla en uno de los centros financieros más atractivos del mundo, relajando la política fiscal y eliminando las amenazas burocráticas. Sin duda, lo han conseguido.

Su capital, Road Town, está situada en la isla de Tórtola y es la más grande y poblada de todas, con 21,5 millas cuadradas de extensión y unos 25.000 habitantes. Esta ciudad tiene unas condiciones climáticas excelentes, prácticamente sin variaciones a lo largo del año, lo que la convierte en un destino vacacional perfecto.

Además, las islas de Anegada (15,2 millas cuadradas), Virgin Gorda (8,5 millas cuadradas) y Jost Van Dyke (3,2 millas cuadradas), cada una de ellas con increíbles paisajes de playa, proporcionan a las IVB un inmenso valor turístico. Cada año, estas islas son más populares entre los viajeros y los inversores. Y si sigue leyendo, entenderá todo el revuelo.


La Joya del Caribe 

El turismo es una parte fundamental de la economía de este territorio de ultramar, ya que todos los negocios relacionados con este ámbito suponen el 45% del PIB total. Es habitual que las islas reciban cientos de cruceros al año, y una de ellas incluso acoge un festival de vela de fama mundial: la Regata de Primavera de las Islas Vírgenes Británicas. El éxito del turismo catapulta a las IVB como una de las economías regionales más prósperas. 

Ese éxito tiene sus razones de ser. El crecimiento y el desarrollo de esta nación han sido exponenciales, no solo para los inversores sino para todos sus habitantes. En 2016 se conformó el Sistema Nacional de Seguro de Salud, que dio paso a una cobertura nacional universal al sistema de salud y redujo considerablemente la tasa de mortalidad de los habitantes.

Estas islas tienen uno de los índices de criminalidad más bajos de toda la región del Caribe, ya que la Organización Mundial de la Salud ha reportado tan solo 2 homicidios por cada 100.000 habitantes. Esto se explica por la baja tasa de desigualdad presente en el territorio, ya que se sitúa en el cuartil más bajo de todos los miembros de la Organización de Estados del Caribe Oriental.

Además, la calidad general de los servicios es notable en comparación con las naciones cercanas. El sistema de transporte también ha contribuido a que la popularidad de las Islas Vírgenes Británicas crezca, ya que hay más de 70 millas de carreteras a disposición de los conductores, y la mayoría de los aeropuertos han sido equipados con tecnología punta.

Y las buenas noticias no acaban ahí, ya que sus finanzas son tan buenas como su sanidad, seguridad y servicios generales. No es casualidad que la renta nacional bruta per cápita ronde los 50.000 dólares, lo que la convierte en una de las mejores del mundo teniendo en cuenta su pequeño tamaño y su población total.


Los Servicios Financieros de las Islas Vírgenes Británicas: un Modelo de Éxito conocido en todo el Mundo

El aspecto clave de la prosperidad de las Islas Vírgenes Británicas radica en sus servicios financieros, mundialmente conocidos por ser amigables con todos los que se dedican a los negocios dentro de las islas. Aproximadamente la mitad de los ingresos totales de las IVB proceden de este ámbito, en su mayoría generados a través de las licencias de las empresas offshore.

Se estima que más del 45% de las empresas offshore existentes están acreditadas en el territorio de las IVB, siendo una de las más reconocidas el Citgo Investment Fund. Este fondo de gestión privada fue fundado en 1948 y actualmente gestiona más de un billón de dólares en capital de inversores, lo que lo convierte en el mayor fondo gestionado del planeta.

Entonces, ¿qué es exactamente lo que genera tanto interés de los inversores en las costas de las Islas Vírgenes Británicas? ¿Por qué tantas empresas la eligen como destino de sus inversiones y por qué ha tenido tanto éxito?

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¿Qué Hace que las IVB sean un Lugar Atractivo para la Inversión?

Contextualizando las ventajas generales, podemos empezar destacando que estas islas existen bajo la jurisdicción territorial del Reino Unido, lo que les confiere una estabilidad política fundamental a la hora de ubicar capitales. No es ninguna novedad que las autoridades británicas se han propuesto desarrollar sus colonias como centros financieros atractivos para la inversión.

En segundo lugar, su mano de obra es muy cualificada y diversa. Sólo el 37% de su población es nativa de las islas, lo que significa que hay una gran migración profesional debido a la prosperidad económica del territorio. Existe un clima laboral y de inversión ideal debido a los excelentes proveedores de servicios ubicados en las islas. Esto también dota a las IVB de una inmensa diversidad cultural que alimenta los negocios y la innovación en su conjunto.

El sistema jurídico presente en las IVB también favorece la inversión de capital, ya que el derecho consuetudinario británico es ideal para promover la innovación empresarial y financiera. 

Dos principios centrales rigen este sistema. Por un lado, la mínima regulación estatal posible que permite la libre circulación de capitales. En segundo lugar, y el más famoso, la exención de impuestos para las empresas offshore.

Este moderno sistema financiero es aprovechado de forma productiva por el sistema bancario local, ya que está abierto a recibir capital extranjero sin las trabas de los procesos típicamente exigidos en la mayoría de los países. Esto ha permitido que una inmensa variedad de negocios entren en el sistema bancario de las IVB, desde la administración de servicios comerciales hasta la propiedad y comercialización de bienes inmuebles o productos de inversión en general.

Esta metodología ha generado una creciente inclusión de capital británico e internacional en los fondos de inversión que operan en las islas. Y vaya si ha funcionado a la perfección para muchos de ellos. Al pagar una cantidad significativamente menor de impuestos en comparación con otros sistemas, la mayoría de estos fondos pueden aportar enormes beneficios a sus inversores. 

La única pregunta sería: ¿Cómo es posible que este atractivo sistema fiscal no sea un sueño para cualquier inversor?


Ventajas Fiscales de las Sociedades Offshore en las Islas Vírgenes Británicas 

Hemos comentado el sistema fiscal que tanto beneficia a los inversores, pero ¿cómo funciona exactamente? Bueno, básicamente no hay impuestos. Esto implica que no hay ninguno de los siguientes impuestos :

-Impuesto sobre la renta

-Impuestos sobre los dividendos

-Impuestos sobre la renta

-Impuesto de sucesiones

-Impuesto sobre donaciones

Además, los no residentes en las Islas Vírgenes Británicas no pagan impuestos sobre las ganancias de capital derivadas de la venta de acciones o activos de la empresa, y no hay restricciones de divisas, gravámenes o impuestos.

Es importante señalar que todos los procesos de registro de empresas son bastante sencillos y rápidos, independientemente de su naturaleza. La creación de una empresa sólo requiere unos requisitos mínimos que incluyen la presencia de un director general y un accionista (que pueden ser incluso la misma persona). 

Entre los pocos requisitos que se necesitan para constituir una sociedad en las Islas Vírgenes Británicas están:

-Director general y accionista

-Nombre único

-Tener una dirección y un sello corporativo de las islas. Esto lo puede proporcionar la persona encargada de constituir la sociedad en el territorio.

Recibir un Certificado de Constitución en las IVB puede llevar tan sólo 24 horas, lo que lo convierte en el procedimiento más rápido del mundo para registrar una empresa. Además del escaso número de requisitos, esta modalidad de registro admite licencias de función de inversión pre aprobadas en China, Hong Kong, Brasil, EE.UU. y el Reino Unido, por lo que no es necesario un proceso de constitución adicional.

El capital estándar para la constitución de una empresa es de 50.000 dólares, pero no existe un desembolso mínimo. Asimismo, la emisión de acciones es posible a través de un agente autorizado. Cualquier empresa acreditada en las Islas Vírgenes Británicas puede celebrar sus reuniones en cualquier parte del mundo y está exenta de declarar lo tratado. El único requisito es el proceso contable natural para poder llevar a cabo el pago de la tasa de exención fiscal y el mantenimiento de la empresa local.


La Confidencialidad es la Clave: Cómo Protegen su Información las Islas Vírgenes Británicas

Uno de los aspectos más atractivos a la hora de localizar capital en las Islas Vírgenes Británicas reside en su política de confidencialidad. Este sistema no es habitual en los centros financieros de todo el mundo y permite a las empresas mantener en secreto gran parte de sus operaciones si sus miembros así lo desean.

La legislación local permite a los propietarios de las empresas mantener protegidos todos sus datos personales, ya que el secreto bancario es un principio que rige todo el sistema financiero del territorio. Por lo tanto, no se exige la presentación anual de las cuentas, y no hay obligación de llevar una contabilidad interna ni de realizar auditorías de las operaciones.

Así, bajo la protección de la Ley de Ordenación de las Sociedades Comerciales Internacionales de las IVB, toda la información de los directores, accionistas y miembros de las empresas fundadas en las IVB está absolutamente protegida. Este privilegio es único en el mundo y no puede dejarse de lado a la hora de considerar las diferentes opciones para establecer su empresa. 

Hemos visto cómo las Islas Vírgenes Británicas ofrecen pocos o ningún obstáculo a los inversores de todo el mundo. Un sistema de registro de alta velocidad, impuestos casi inexistentes y una completa confidencialidad son condiciones muy apreciadas por cualquiera que desee crear una empresa financiera.

Hay muchas razones para iniciar este proceso, y si eso no es suficiente, considere cómo pasará unas vacaciones inolvidables a orillas de uno de los paisajes más impresionantes del Caribe. Sin duda, las Islas Vírgenes Británicas lo tienen todo.

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